Ben Loban

¿Descuidamos momentos que sin duda hubieran marcado una diferencia, o simplemente los momentos descuidados son oportunidades de descubrir lo que en realidad somos?

Todo pasa por algo, y ese algo ocupa la mayor parte de de nuestros pensamientos, aunque a veces actuemos inconscientemente.

Somos demasiado duros con aquellos a quienes queremos, a menudo sin respetar quienes en realidad son…

Somos atacados por la absurda y cruel duda, esa misma que únicamente pone a prueba nuestra confianza

Deseamos encontramos a nosotros mismos, tal vez lejos de este mundo, donde el silencio grita nuestro nombre y nuestra presencia llena de vida aquello que dábamos por muerto.

Un mal capítulo no debe ser el final de una historia, o así queremos creerlo, ya que buscamos a pesar de no encontrar…

Avanzamos con miedo a perdernos pero firmes ante nuestras inquietudes.

Vivimos buscando una sombra donde poder cerrar los ojos eternamente y descansar creyendo que nada fue en vano.

Buscamos el momento adecuado , así como intentamos hacer de nuestro tiempo algo más que un recuerdo y queremos más de lo que hoy tenemos…

Decimos lo que sentimos de forma tan clara como turbia es lo que tenemos.

Gritar y romper ese incomodo silencio, dejar caer el peso de la duda sobre nosotros, llorar y ahogarnos en el inmenso mar que creamos nosotros mismos, abrazados a la pena.

Convencer a la soledad de que no estamos solos…

No hay errores a lo largo del camino, solo acontecimientos que nos advierten en nuestro presente.

Aceptamos nuestros errores, pero difícilmente las consecuencias de estos.

¿Egoístas? Sí, pero, ¿quién no siente la necesidad de serlo, si su actitud errata confiesa su más vigoroso sentir?

Texto/ Fotografía : Carmen Martinez

Con todos mis respetos para Benjamin Thomas loban